viernes, 4 de abril de 2014

JULIA. MUERTE ASEGURADA de BERARDI, CARACUZZO & DALL'AGNOL

JULIA, muerte asegurada - las aventuras de una criminóloga de Berardi, Carcuzzo y Dall Agnoll. Edita Aleta
Aleta, 2014
256 páginas, 13,95 euros

LOS SERIALES SON PARA SIEMPRE


Desde sus orígenes, el comic se ha caracterizado por narrar historias eternas con personajes que no mueren nunca, continuando la tradición de los seriales. Cuando una serie tiene éxito ¿por qué interrumpirla?


Aunque con los años se ha conseguido una mayor variedad, la fórmula del “continuará” permanece. Muchos lectores se mantienen fieles a un personaje o título, olvidando qué autores se esconden detrás.

Algunos de los mejores tebeos todavía se encuentran entre las páginas de sagas muy populares, que conservan su calidad número tras número. Hoy quería citar algunas de esas series. Como Macanudo, de Liniers editado por Random House. El humorista argentino alcanza el noveno volumen que recopila su peculiar tira y mantiene todas sus constantes. Humor tierno o surrealista, da igual, al final siempre consigue hacernos sonreír.

Macanudo de Liniers


La serie de Los Muertos Vivientes ha conseguido una justa fama gracias a su adaptación televisiva, pero el tebeo original sigue en marcha y su interés no desciende. Los dibujos de Adlard son tan eficaces e impactantes como narrativos y los guiones de Kirkman continúan enganchándonos y manteniéndonos en vilo. A estas alturas los zombis son ya casi parte del paisaje y los verdaderos problemas los causan los vivos, los demasiado vivos. Ya he recomendado tantas veces esta serie que poco más podría añadir.

Julia - Historias de una criminóloga
De América nos vamos a Europa, más concretamente a Italia, de donde nos llega Julia, otra de mis favoritas. La edición española alcanza el octavo libro, que incluye material de 1999 y 2000. Como siempre, excelente. Puestos a elegir me quedo con la segunda historia, donde se entrelazan los recuerdos reprimidos de uno de los personajes con las andanzas de la protagonista, en este caso en plena aventura sentimental con un colega recién separado. Es una delicia comprobar cómo Giancarlo Berardi, el guionista, dispone sus piezas en un delicado conjunto donde nada sobra y todo aporta su fragmento de realidad a una obra tan detallada como interesante. El dibujo, como siempre, impresionista y real, fresco pero ajustado permanentemente a lo narrado.

Dejo para el final lo más exótico. De Europa nos trasladamos a Japón, donde ya hace años Tezuka publicó Fenix. En España se editaba hace poco su quinto tomo recopilatorio. Se inicia con una muerte y luego se nos explica lo que le ocurre a ese personaje que se acaba de estrellar contra el suelo, en una retorcida historia de resurrecciones. Sonaría muy raro si no fuera porque ya hace tiempo que sabemos que en Fénix puede pasar cualquier cosa. En esta gran reflexión sobre la vida y la muerte hemos visto fuerzas cataclísmicas en conflicto y luchas apocalípticas que nos han curado de espantos. Casi cualquier cosa es posible con Tezuka, su imaginación y arrolladora pasión narrativa no conocen límites así que entrar en Fénix es prepararse para que lo imposible se convierta en cotidiano. En el volumen conviven varios relatos donde se nos habla de robots que se sienten humanos y humanos que son reconvertidos en robots, y las consecuencias de estas situaciones. Al final, todo acaba rondando los grandes asuntos que preocupaban al autor: qué es lo que nos hace vivir y cuáles las razones para enfrentarse a la muerte y la desesperación.

Y, ya que hablamos de series, quiero recordar que Giménez casi ha concluido su trabajo dedicado a Pepe González, edita Panini  y que Sakai ha abandonado momentáneamente su Usagi Yojimbo para dibujar 47 Ronin una novela gráfica con samurais de verdad.

Pepe de Carlos Giménez, edita Panini Comics 47 Ronin de Mike Richardson y Stan Sakai (Usagi Yojimbo), edita Planeta deAgostini